Hay dos verdades de Perogrullo que sustentan el trabajo del Proyecto de Desarrollo Local (PDL) Las Margaritas, de Ciro Redondo. La primera es que son la agricultura y la ganadería las que dan de comer al país, aunque sea frugalmente. La segunda es que no son hombres quienes producen esa comida: son familias enteras.
Son verdades tan olvidadas, que este negocio familiar ha debido levantarlas como banderas para encaminarse a una explotación sostenible en el tiempo y, precisamente, a encender luces al respecto es que van este 17 de abril al VI Taller de Igualdad de Género, Sostenibilidad e Internacionalización. Mujeres Empresarias en Cuba (WEIC 2023).
No es un PDL cualquiera Las Margaritas y eso queda claro tras hablar unos minutos con Maite Cruz Hidalgo e Israel Rodríguez Ríos, el matrimonio al frente de la empresa. Ganaderos, gente de campo con un grandísimo conocimiento científico, convencidos de su modo de vida limpio y tranquilo en Virginia, a varios kilómetros de nuestras ciudades.
Cada onza de queso Margarita ha coagulado no solo leche de vaca, sino también los saberes y la tradición amasada por varias generaciones de mujeres en el árbol genealógico de Israel. Por eso Maite sabe lo que dice cuando se refiere a la necesidad de que las familias de campo permanezcan allí.
“Eso es lo que vamos a presentar a La Habana. Nuestra apuesta por las familias ganaderas, por mejorar sus condiciones de vida para que permanezcan en el campo, por reconocer el trabajo de las mujeres de esas familias. Buscamos, también, posibilidades de financiamiento”. Y si alguien puede hacer que cuente cada inversión son ellos, convencidos de la importancia de criar animales con alimento orgánico, pastorear con bondad e incorporar la tecnología necesaria para diversificar producciones y mantener estándares de calidad.
Todo logrado, en gran parte, por manos de mujer. “Hacíamos una encuesta―cuenta Maite― acerca de cómo ve la gente a una mujer emprendedora, trabajadora, y todos contestaban que en salones de belleza, haciendo manualidades, en negocios de costura… Nadie piensa en la agricultura, por ejemplo. Por eso llevamos a La Habana los videos de nuestras mujeres, trabajando directo en la producción y llevando el peso de la casa, porque, lamentablemente, nos falta mucho para que el trabajo doméstico no sea solo femenino”.
Dudas no quedan del esfuerzo de la mujer rural avileña y cubana, lo que queda es, en todo caso, lograr que su esfuerzo y el de su familia retribuyan lo suficiente para tener una producción agropecuaria sostenible. Y por eso le deseamos toda la buena suerte a Las Margaritas este lunes.
Desde el pasado lunes, cuando en los altos de la casa de cultura Haydée Santamaría Cuadrado se organizaba la expoferia Morón Emprende, una cosa aconsejaba Yunet Pérez Pérez, cotitular de Delavida, proyecto dedicado a la elaboración artesanal de jabones: “tenemos que venir pensando en colaborar”.
El WEIC 2023 está patrocinado, entre otras organizaciones, por la Cámara de Comercio de Cuba, la Federación de Mujeres Cubanas, la fundación Italia Cargo, la Asociación Europea de Medicina del Bienestar, la Embajada de Cuba en Italia y el grupo Empresarial Palco.
Su objetivo es brindar herramientas a mujeres empresarias y profesionales para aprovechar oportunidades de mercado ante las transformaciones de la economía global, causadas por la crisis sanitaria. El enfoque es de una economía sustentable, que proporcione bienestar y salud, en la que el crecimiento de las empresas vaya aparejado con la reproducción de la vida.