La provincia de Ciego de Ávila incrementa por estos días la pesquisa activa, no sólo contra el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, sino también para detectar la presencia del mosquito Aedes aegypti, agente transmisor de enfermedades como el dengue.

Lianys Coroa Castro, directora de Higiene, Epidemiología y Microbiología en el territorio, explicó a la prensa que las altas temperaturas, humedad y lluvias  propician condiciones ideales para la proliferación del vector, transmisor del dengue, el zika, el chikungunya y la fiebre amarilla, que de hecho presenta un alto índice de infestación, por encima de los niveles permisibles.

Ante esa realidad, dijo, se intensifica el pesquisaje para determinar y clasificar los casos febriles inespecíficos, los cuales se ingresan en el centro de aislamiento ubicado en la facultad de Ciencia Médicas José Aseff Yara, en capital avileña.

La mayor prevalencia del vector se registra en los municipios de Ciro Redondo, Baraguá, Morón y Ciego de Ávila, en los cuales se acrecienta el tratamiento adulticida contra el insecto y se realiza la fumigación de los hogares en el perímetro establecido en caso de detección de focos.

Gilberto Suárez Hernández, subdirector de Higiene y Epidemiología en la localidad de Majagua, dijo a la Agencia Cubana de Noticias que aunque en mayo no hay casos confirmados con la enfermedad, sí existen reportes de focos que incrementan el índice de infestación.

La mayor incidencia se localizó en los tanques bajos de almacenamiento de agua, o sea, la población vive con el peligro dentro de casa, donde la percepción del riesgo todavía no es la que exige el momento, advirtió.

Entre las acciones que se realizan actualmente para eliminar los posibles criaderos están las visitas de los operarios y las radiobatidas: inspección y saneamiento en un área de cien metros a la redonda de la zona donde se detecte el riesgo, durante tres fases con días alternos, en tanto se orienta a la población realizar el autofocal para contribuir a preservar su salud.

Marielys Tejera, madre de una niña de ocho años de edad, declaró que lleva varios días en el centro de aislamiento, pues la pequeña presentó una fiebre inespecífica, y aunque no ha tenido otros síntomas se mantiene bajo vigilancia el tiempo requerido para descartar el padecimiento de alguna enfermedad trasmitida por el Aedes aegypti.