Con predominante presencia de pacientes avileños, a quienes personal altamente especializado les ofrecen excelente atención desde los puntos de vista científico, terapéutico y humano, los hospitales de Camagüey siguen confirmando el rol determinante e integrador de la ciencia médica  cubana para  salvar vidas humanas frente al violento rebrote que ha registrado el SARS-CoV-2 en Ciego de Ávila desde hace casi seis semanas.

Con tendencia un poco más favorable últimamente en el estado que presentan los pacientes al arribar procedentes del territorio avileño, comparado con los inicios del repunte pandémico, las dos instituciones médicas agramontinas siguen, paso a paso, durante las 24 horas de cada día, la evolución individual de los 240 pacientes ingresados actualmente en sus distintas salas.

Doctores como Eduardo Rivero Peláez, al frente del Hospital Clínico Quirúrgico Amalia Simoni, consideran que el hospital no hace otra cosa que cumplir sus funciones y responder al llamado del país en un momento tan complejo. Por su parte Taurino Simón Cruz Padilla, director del Hospital Militar Dr. Octavio de la Concepción y la Pedraja, que todo fluye sobre la base de un extremo rigor en las medidas preventivas internas para evitar la menor complicación.

Pacientes avileños hospitalizados en ambas instituciones, coinciden unánimemente en un mismo hecho: no encontrar las palabras exactas o el modo más justo para expresar su agradecimiento y corresponder una atención que trasciende con creces el ámbito médico o científico para calar en lo más profundo de la sensibilidad humana.