La realidad de que ninguna preocupación e inquietud por parte de quienes laboran la tierra y producen alimentos, tanto en el sector estatal como en el cooperativo y campesino, quedará al margen de los análisis fue la máxima que primó en una reunión con los productores agropecuarios de esta provincia, para evaluar el impacto de Tarea Ordenamiento en el sector.

Varios planteamientos e inquietudes expuestos, como los referidos al nuevo precio de la leche y su acarreo, la tarifa para el cobro de la electricidad, los impagos, la eficiencia económica, las exportaciones y las fichas de costos de cada una de las producciones, entre otros temas, ocuparon el centro del intercambio, «diáfano y esclarecedor», como lo calificó Noel Rodríguez Mesa, presidente de la Cooperativa de Créditos y Servicios (CCS) José Martí, quien intervino en nombre de los 362 asociados a su organización de base.

Al encuentro asistieron productores destacados, presidentes de cooperativas, directores de empresas y autoridades del Partido y el Gobierno en el territorio, encabezados por el miembro del Comité Central del Partido y del Consejo de Estado, Rafael Santiesteban Pozo, presidente de la ANAP; Meisi Bolaños Weiss, titular del Ministerio de Finanzas y Precios y Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura.

Varias intervenciones coincidieron en que el precio del litro de leche a siete pesos y cincuenta centavos no cubre todos los gastos que se han tenido en los insumos productivos, incluidos los puntos refrigerados, con un alto consumo de electricidad y el salario de quienes allí laboran.

Sobre estos puntos, el titular de la agricultura refirió que en la tarifa de pago de la electricidad no está concebido que, por ineficiencia de alguien, la leche permanezca allí 10 horas, 12 y hasta 24, como ha sucedido en determinados lugares.

«Los puntos de enfriamiento, como su nombre lo indica, —aclaró el titular de la agricultura— están dispuestos para preservar el alimento tres, cuatro o cinco horas con la mejor calidad posible, hasta que sea trasladada hacia la industria láctea».

Lo cierto es que, en esos puntos de acopio, tanto los productores como la industria, tienen su mejor aliado.

En otro punto de la reunión, Rodríguez Rollero cuestionó las pérdidas de la empresa agroindustrial Ceballos luego de que llegara la Tarea Ordenamiento. Insistió en que esa entidad saldrá fortalecida, a partir de la experiencia que tiene en la exportación de una amplia gama de productos, como el carbón vegetal, la piña MD-2,  jugos de frutas, entre otros s urtidos.

«Nadie va a entender que una empresa como esa tenga pérdidas, si siempre ha sido de vanguardia, una de las más destacadas de su tipo en el país», comentó al plenario.

Alba González Rodríguez, directora, refirió que en enero perdieron más de cuatro millones de pesos, algo que jamás había sucedido, pero estiman cerrar con utilidades el primer trimestre y para ello cuentan con la voluntad de los trabajadores y directivos, máximos actores para lograr que «salga a flote», como va a suceder.

Por lo pronto, «el ajuste a los precios de frutos de guayaba, mango y frutabomba, aparejado al asesoramiento realizado por especialistas de la ANEC, la Universidad Máximo Gómez Báez y otras instituciones, permitirá en marzo la rebaja de hasta un 35 % de los precios de los productos elaborados que la entidad expenderá a la población. Vamos ordenándonos y aprovecharemos todas las oportunidades», adelantó González Rodríguez.

El titular de la agricultura recabó la necesidad de examinar cada eslabón de la cadena productiva, que es donde se genera la eficiencia. «Los problemas de una producción no se pueden traspasar en forma de precios a la población para que sea el pueblo el que los pague», abundó.

Meisi Bolaños Weiss, Ministra de Finanzas y Precios, dijo que entre todo lo bueno de la Tarea Ordenamiento destaca que «nos revela distorsiones e irregularidades que estaban desde antes y hoy no pueden ser asimiladas» y aclaró que en el caso de la electricidad el reordenamiento solo redujo parcialmente el subsidio a la factura millonaria que gasta el país por ese concepto, de ahí la necesidad de ser más eficiente y racionales en los procesos.