Cabezal Acontecer Elimina el Bloqueo ElMundoDiceNo1

    La “zafra” del hospital moronense

    Ratio: 5 / 5

    Inicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activadoInicio activado
     
    Valoración:
    ( 1 Rating )
    Pin It

    foto 1Trece ocupaciones de bienes, en las últimas dos semanas, aunque no representan una cifra significativa, refieren el esfuerzo para restablecer el orden en el Hospital General Docente Roberto Rodríguez, del municipio de Morón, donde la pandemia de COVID-19 revela males acumulados.

    La identificación de hechos asociados al desfalco de jeringuillas, guantes, apósitos, torundas, medicamentos, productos para la limpieza y desinfección, alimentos y medios de protección, aunque constituyen una respuesta y pudieran desencadenar severas sanciones administrativas y penales, no representan un triunfo, al considerarse la incapacidad para prever y actuar sin necesidad de impulsos, y la insuficiente atención al llamado de orden, disciplina, exigencia y control.

    Desde su esencia, esas cuatro palabras que también salvan, enuncian cuánto se dejó de hacer y el espacio cedido a la impunidad, raíz del mal que ha adjudicado despreciables calificativos a una institución hospitalaria y causado perjuicios económicos y humanos que tal vez nunca podamos calcular, ni siquiera imaginar.

    En la “zafra” de este “central”, que muele todo el año, durante las 24 horas, la ineficiencia tiene un costo invaluable porque “procesa” seres humanos que apuestan, junto a sus familiares, al sistema de salud pública cubano, reconocido en la Isla y allende los mares. ¿Cómo juzgar, entonces, a quienes ponen en riesgo la vida de sus semejantes y la confiabilidad de un centro de asistencia médica? ¿Cómo calificar a quienes tenían la obligación de prevenir y no lo hicieron, cediendo espacio a los malhechores?

    foto 2Son múltiples las interrogantes que afloran ante estos hechos, con certeza indicativo de cuánto pudo suceder anteriormente y ―no lo dude― cuánto puede estar ocurriendo, a pesar de que las acciones ejecutadas por los órganos de control y enfrentamiento operativo favorecen la contención de estos hechos al identificar causas y condiciones, y “quitar la venda” a quienes no vieron, prefirieron no ver o callaron, otra manera de hacerse cómplices de tales desatinos.

    El anhelado orden, aunque distante aún, recupera su lugar en el Roberto Rodríguez, donde Guillermo Alfaro Rodríguez, director de la Agencia de Seguridad y Protección (SEPROC), estableció su oficina para chequear más de cerca, junto a cuatro jefes de brigada e igual cantidad de oficiales de guardia, la labor de los 101 agentes, cantidad esta última que suplió el déficit existente y permitió el reforzamiento de seis posiciones, incluidas las de mayor flujo de personal y las entradas de vehículos.

    Al lograrse la cobertura de las posiciones de seguridad y protección también se consigue disminuir los accesos innecesarios, lo cual resulta favorable para la conservación y el control de los recursos, y minimiza los riesgos de transmisión institucional.

    Menos personas pudieran entrar si funcionaran debidamente los mecanismos para informar a los familiares de los pacientes que aguardan afuera y se limitara la entrada a trabajadores que no prestan servicios en la actualidad.

    Las acciones de enfrentamiento también han tenido impacto en la calidad de la alimentación a pacientes y trabajadores, al prohibirse la extracción de comida y desperdicios de esta, medida que obedece a la necesidad de reducir el riesgo epidemiológico y disminuir las posibilidades de sustracción ilegal de recursos mediante el empleo de modos de operar como la introducción en vasijas con sancocho.

    No obstante, en las salidas, la labor de los agentes de seguridad y protección continúa siendo difícil porque, ante la falta de control y exigencia, principalmente en las áreas de elaboración de alimentos, los trabajadores persisten en llevarse productos.

    Yipsi Davis Toledo, jefa del Área No. 3, donde se encuentra enclavado el hospital (según la distribución de SEPROC), apuesta a una mayor implicación de los directivos del centro en estos asuntos, atendiendo a las responsabilidades que les asisten ante la Ley y la urgencia de organizar los flujos de trabajadores en determinados espacios, de modo que se facilite la revisión de pertenencias y no se vulneren los sistemas de seguridad.

    Trece hechos, con mayor o menor gravedad, contenidos o no en denuncias, pero todos con diferentes lecturas sobre la realidad de un hospital, indican el comienzo en la ardua tarea de restaurar la disciplina y el orden, procesos que no ocurren de manera espontánea, por tanto, se requiere incrementar la exigencia y el control, responsabilidad de todos los factores que interactúan en ese ámbito, quienes deberán comprender la unidad como elemento indispensable para lograr la eficiencia en la “zafra” del hospital moronense.foto 3

     

    Escribir un comentario

    ¿Con qué frecuencia accede al Portal del Ciudadano?
    ¿Cómo valora la calidad y el funcionamiento del sitio?
    ¿Qué secciones visita de nuestro portal?
    A su juicio, nuestro portal debería enfocar la prioridad de trabajo en: