En Abdala: respirar a Martí

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En Abdala: respirar a Martí

 

¿Martí vive? Una sencilla pregunta que no pretende ofender al Maestro ni a quienes asumimos y estudiamos hoy su pensamiento, en la Cuba de 2022, porque los saberes más sencillos perduran en el tiempo; a eso nos enseñó.

Nos enseñó, además, de humanismo, de justicia, de equidad social… instruyó también de moral, eticidad, democracia, espiritualidad, y también a entender las injusticias del mundo.

¿Y qué fuese del mundo sin Martí? ¿Qué hubiese sido de Cuba sin su pensamiento guía? Sin duda alguna el protagonismo del Apóstol ha recorrido desde Nuestra América hasta Europa, pasando por el cauce de los ríos y luego al cielo más azul que pueda existir.

Martí escribió Abdala, la soñó, la idealizó. Si escudriñamos en la esencia del poema, narra la historia de un joven negro africano que combatió y murió por la independencia de Nubia, su país, el cual fuese invadido por colonialistas. Es, además, la primera obra de teatro escrita por Martí, con solo 15 años, y publicada el 23 de enero de 1869 en el primer y único número del periódico La Patria Libre, impreso en la calle Obispo, números 20 y 22, en La Habana.

Algunos conocedores de la vida del Apóstol coinciden en que la existencia de Abdala descrita por Martí, en gran medida, fue un anticipado reflejo de la suya, ya que con el tiempo él también se enfrentó a contradicciones que se generaron en el seno familiar, ante la decisión de priorizar como proyecto de vida la lucha por la independencia de su tierra natal.

Por fin mi frente se ornará de gloria!

Seré quien libre a mi angustiada patria,

y quien le arranque al opresor el pueblo

que empieza a destrozar entre sus garras!

Ahora Abdala vuelve a servir como nombre para escribir historia. Es la esperanza personificada, con esfuerzo de tantos científicos que no pegaron los ojos para lograr que hoy Cuba tenga también una soberana vacuna para enfrentar la actual pandemia.

¿Y qué ven los jóvenes en Martí? Lil María Pich, miembro del ejecutivo del Movimiento Juvenil de Estudios Martianos expresó hace solo unos días que “Abdala es una pieza teatral reveladora que va más allá de la muy conocida cita: El amor, madre, a la patria/ No es el amor ridículo a la tierra, /Ni a la yerba que pisan nuestras plantas; /Es el odio invencible a quien la oprime, /Es el rencor eterno a quien la ataca (...).

“Abdala es expresión de la madurez y el talento de aquel joven, estudioso de su realidad y de la literatura universal; se codeó con la intelectualidad más revolucionaria de su tiempo, de la cual formó parte su maestro Rafael María de Mendive”.

Ni laurel ni coronas necesita

quién respira valor. Pues amenazan

a Nubia libre, y un tirano quiere

aendirla a su dominio vil esclava.

¡Corramos a la lucha, y nuestra sangre

pruebe al conquistador que la derraman

pechos que son altares de la Nubia,

brazos que son sus fuertes murallas!

Por eso, desde el cabo de San Antonio hasta la punta de Maisí, podemos asegurar que Martí nos acompaña como firme guía para demostrarnos que Dos Ríos solo fue un paso a la inmortalidad, y que por siempre conducirá el camino de cubanos y cubanas, alertándonos y construyendo un país “con todos y para el bien de todos”.

¿Yo detenerme, madre? ¿No contemplas

el ejército ansioso que me aguarda?

¿No ves que de mi brazo espera Nubia

la libertad que un bárbaro amenaza?

Martí tuvo la audacia de profetizar las intenciones de los Estados Unidos y a impedirlas se consagró. Por eso la lucha de hoy también es de él, de cubanos todos, los que hoy alabamos con vehemencia la primera vacuna de Nuestra América contra la COVID-19.

Y qué mejor homenaje este 28 de enero que mirar nuestro hombro y reconocer que nunca será suficiente el agradecimiento a los miles de voluntarios anónimos que estuvieron y permanecen aún en zonas rojas, jóvenes en su mayoría, Abdalas en su totalidad, porque todo honor es poco para quienes aman y fundan, para quienes sirven a Cuba.

Nubia venció! muero feliz: la muerte

poco me importa, pues logré salvarla...

Oh! qué dulce es morir, cuando se muere

luchando audaz por defender la patria!