Luego de dos años sin poder disfrutar de la más grande fiesta del libro y la literatura en Cuba, la Feria Internacional del Libro 2022 reavivó las alegrías para los autores y el público, quienes vivieron la agitación propia de este evento en la capital, parada oficial antes de emprender su gira por todas las provincias del país.
Con esas buenas vibras, escritores avileños del catálogo de Ediciones Ávila y otros cuyas obras han visto la luz bajo diversos sellos editoriales nacionales, emprendieron el viaje hacia La Habana, oportunidad expedita para el intercambio y la promoción de los materiales.
En esta travesía se incluyeron Eduardo Pino, con los libros Adonde van los pájaros y Solo contra la noche; Yasmani Rodríguez Alfaro, con A la sombra del mago, premio Eliseo Diego 2019; Yamila Ferrá, con Palabras del naufragio; Dania Silvia Sorí, con Los cuentos de Daniela; y Lioneski Buquet, con Niños así de grandes y Testamento de las sombras.
Los premios Eliseo Diego 2020, en las categorías de Ensayo y Narrativa, también estuvieron en el cronograma. Así, se presentó Eliseo Diego, registro de permanencia, de Daniel Céspedes Góngora, momento en el que participó Josefina Diego, hija de este ilustre autor; y Zoko y otras imitaciones, de José León Díaz.
Además, se promocionó el número uno de la nueva época de la revista Videncia, así como los ejemplares El misterio de la bola de cristal, de Belkis Reyes Soto (Ediciones Loynaz); y de Leonel Daimel García Aguilar, Akokán, cuando los orichas eran niños (Ediciones Loynaz), Un mundo para Fabio (Ediciones Montecallado), y Maricela y el payaso (Ediciones La luz).
Otros títulos de autores del terruño encontraron espacio en la cita, entre ellos, Tina Modotti, mucho más que un cuerpo desnudo, de Reina de la Caridad Torres Pérez; y Entre col y colegas, de Pastor Batista Valdés, ambos auspiciados por la Casa Editorial Pablo de la Torriente Brau.
Fue alegría compartida el reconocimiento otorgado a la librería La Moderna Poesía, de Morón, durante el evento de libreros, por ser la de mejor gestión en el país; avalada, asimismo, por los años de historia que sustentan a este colectivo, el cual desde mucho antes de ser un proyecto Ateneo ya cumplía planes y mantenía propuestas culturales interesantes en cartelera.
Las presentaciones transcurrieron en las salas: Dora Alonso, en el complejo Morro-Cabaña; José Lezama Lima, en el Colegio de San Gerónimo; y Alejo Carpentier, del Palacio de los Capitanes Generales.
A pesar de la premura y de que no todos los espacios contaron con los espectadores deseados, la delegación avileña aprovechó para bien la cita y, desde ya, mira con luz larga al 19 de mayo, fecha en la que debe iniciar aquí nuestra Feria del Libro.