Una vez concluya el presente calendario docente, los centros educacionales de Ciego de Ávila recibirán una nueva inyección de maestros, de cara al venidero curso escolar, cuando 299 estudiantes egresen de las escuelas pedagógicas ―en la que será la mayor graduación de estos planteles desde su apertura―, para poner en práctica, frente al aula, lo aprendido a lo largo de estos años de formación.
Desde la Dirección Provincial de Educación (DPE), la Dra. C. Sulay Monzón García, jefa del Departamento de Formación Pedagógica, Superación y Actividad Científica, precisó a Invasor que este año la Escuela Pedagógica Rafael Morales, de Morón, graduará 143 alumnos en las especialidades de Primera Infancia, Primaria, Especial, y también lo hará en manifestaciones de las Artes, como las Artes Plásticas y la Música, para el nivel educativo Primario; y Visual-Teatral y Musical-Danzario, para la Secundaria Básica, estas dos por primera vez.
Al mismo tiempo, culminan estudios en la Raúl Corrales, de la ciudad cabecera, 156 jóvenes en especialidades como Matemática, Física, Historia, Química, Primaria y Primera Infancia.
A ellos se suman los 115 educandos que cierran su formación en el Instituto Politécnico Armando Mestre, como maestros para la Enseñanza Técnica Profesional, en las especialidades Agropecuaria, Construcción Civil, Eléctrica, Informática y Contabilidad.
Monzón García explicó que si hoy las escuelas pedagógicas logran un mayor número de graduados, comparado con años anteriores, se debe a un nivel de retención que ha ido en aumento, aunque todavía no alcanza los números deseados. Este indicador es clave para asegurar la permanencia de quienes ingresan y elevar las posibilidades de que culminen su preparación como docentes.
En la actualidad, son las especialidades de las Artes las más afectadas, desde este punto de vista, pues “los muchachos entran pensando que las carreras tienen otro perfil que no coincide con el real”, dijo, cuestión que bien podría resolverse desde una acertada formación vocacional.
Para el próximo curso escolar dichas instituciones tienen previsto un plan de ingreso de 564 plazas, pero, según detalló la directiva, hasta el cierre de octubre eran 412 los escolares que optaban por ellas en primera opción, cifra que todavía podría sufrir variaciones antes de que el actual período lectivo llegue a su fin.
Dentro de las especialidades menos favorecidas con el ingreso figuran Primaria y Especial, en tanto, de las diseñadas para la Educación Secundaria Básica, se sigue quedando por debajo Matemática, y en el caso de las Artes, ninguna lograba cubrir el plan de plazas pronosticado.
Si bien el déficit de maestros en Ciego de Ávila no provoca los mismos dolores de cabeza que años atrás, cuando la provincia aparecía entre las de peores números en el país, el reto sigue estando en lograr la permanencia en las aulas, tanto de los que se forman para impartir la docencia, como de los que ya lo hacen.
Como reconoce Sergio Molina González, jefe del Departamento de Recursos Humanos de la DPE, esta nueva generación de maestros representa un aporte importante para las enseñanzas Primaria y Secundaria Básica, al tiempo que ayudará a disminuir las 940 necesidades que, al cierre del pasado mes, no permitían cubrir la totalidad de la plantilla.
Tal déficit ha motivado la implementación de alternativas como el contrato por horas y el incremento de la carga docente, las que también podrán decrecer. De acuerdo a las proyecciones, la entrada de los noveles educadores debe dejar en mejores condiciones para enfrentar el calendario docente 2022-2023, en cuanto a cobertura docente, a los municipios de Baraguá, Majagua, Chambas y Ciego de Ávila.