Día de la Cultura Física y el deporte

Lo grande y lo bello nada tiene que ver con lo exagerado. Eso fue la esencia que dejó el acto provincial por el Día de la Cultura Física y el deporte  y el deporte que tuvo este sábado  como escenario el auditorio enclavado en el centro de la capital avileño.

Porque el municipio Ciego de Ávila, que se ganó la sede la efemérides, no se empeñó en mostrar sus avances en materia deportiva, sino, junto a los organizadores del espectáculo, evidenciar lo mucho que se ha avanzado en la actividad del músculo en toda la provincia.

Es que las ubicaciones competitivas no es la única forma de ver la labor de esta esfera en la sociedad. Viendo las tablas gimnásticas que presentaron desde los  abuelos hasta niños de cuatro o  cinco años de edad, uno se percata que las medallas y los podio no son las únicas que ayudan a negar o afirmar un desarrollo deportivo.

Fue una mañana de esas que los amantes del deporte no olvidamos. Bastaba con saber que  allí se encontraba no pocos de los que han hecho historia en el deporte de aquí. Y fueron lindos los abrazos por el reencuentro.

Si bien se premiaron a los mejores exponentes de la labor de este sector en los últimos meses, también hubo un reconocimiento implícito a todos  los que, de una forma u otra, han puesto su granito de arena en hacer cada día más verdad que el deporte es un derecho del pueblo.

Fue por eso que Leonardo Rodríguez Sánchez, (http://www.invasor.cu/es/secciones/deportes/deporte-en-ciego-de-avila-puede-avanzar-mas)  director provincial de deportes, en las palabras centrales, no habló de grandes éxitos, sino que elogió a la familia deportiva avileña por todo lo alcanzado y por la entereza con que enfrenta las actuales tareas. No fue un acto grandioso, pero lo grande, bien que se demostró, no tiene porque ser  sinónimo de hermoso.