Lesner Gómez, director de la oficina de Turismo en Toronto, Canadá, dijo a la prensa que Cuba es un destino seguro, y cuando la nación del norte reabra sus fronteras y las operaciones aéreas, existirá una avalancha de veraneantes hacia los destinos insulares de la Mayor Isla de las Antillas.

De esa manera mostró su optimismo en la reanudación de las operaciones desde esa nación hacia la Isla caribeña, que recibió en el 2019 más de un millón de personas de aquel país, el principal mercado emisor hacia Cuba, por su hospitalidad, considerada la segunda casa de muchos turistas de aquella nacionalidad.

Cuando en marzo de 2020 la industria de viajes y ocio se vio afectada por la aparición de la COVID-19, con la suspensión de visitas de canadienses hacia el Caribe y, en particular, Cuba, los destinos de mayor demanda en la Isla eran Cayo Largo del Sur (occidente), Varadero (occidente), Cayo Santa María (Centro), Jardines del Rey (centro-norte) y Holguín (oriente).

La promoción y el fortalecimiento de la comercialización en la nación de Norteamérica resulta de extrema importancia, en tanto Canadá constituye el primer mercado emisor de turistas hacia Cuba desde hace más de una década.

De hecho, el 4 de septiembre del pasado año, 104 excursionistas canadienses que arribaron al destino Jardines del Rey, procedentes de Montreal, Canadá, fueron sometidos con rapidez a la prueba de pcr (Reacción en Cadena de la Polimerasa, por su sigla en inglés) y, tras resultar negativos al examen, disfrutaron con creces de las bondades de ese destino, sometido a un turismo más renovado y saludable.

Aunque las operaciones del norteño país están suspendidas, hoy el destino recibe cuatro vuelos a la semana procedentes de Rusia con la totalidad de las instalaciones certificadas al Turismo más Higiénico y Seguro, y su correspondiente Guía, aspectos vinculados a la capacitación de los trabajadores y la regulación de las actividades conforme a la exigencia del momento.