El proyecto “Resiliencia Costera” tiene como objetivo fortalecer e integrar la reducción del riesgo de desastres y la adaptación al cambio climático en los planes de desarrollo socio-económico de sectores y gobiernos de municipios costeros como Chambas.
Y aunque la COVID-19 no permitió avanzar lo esperado, en el área de intervención de Punta Alegre, zona priorizada del Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático en Ciego de Ávila, son visibles las acciones encaminadas a reducir la vulnerabilidad de los sistemas naturales y humanos e incrementar la capacidad de resiliencia. Hasta allí llegaron representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Agencia de Medio Ambiente para evaluar los primeros resultados del proyecto.
La rehabilitación de más de 20 hectáreas de bosques de manglares y la consolidación de los sistemas alimentarios locales se inscriben entre los principales resultados del proyecto internacional Resiliencia Costera en Punta Alegre, en el municipio de Chambas, uno de los cuatro sitios de intervención en el país
En su finca “La Salina”, el productor Jorge Ariel Ferrer Buchillón practica la regeneración natural asistida del mangle
Manejo de especies exóticas invasoras en plantaciones establecidas y bosques naturales (extracción y aprovechamiento económico) de 15 ha de Marabú en el sitio de Pozo Dulce para producción de carbón y 12 ha de Algarrobo de la India y Leucaena para madera de encofre, parlet y otros usos
“Resiliencia Costera” permite el manejo de la regeneración natural del ecosistema costero con la plantación de mangle rojo, prieto, yana y patabán
Rehabilitación del manglar para proteger la franja de costa, reducir la intrusión salina, evitando además la erosión de los suelos y preservar los ecosistemas marinos
Los mantenimientos a los pases ecológicos permiten el mejoramiento del flujo hídrico del ecosistema
