Han transcurrido más de 40 años desde que Andrés García Palmo se desempeñara en el campo corto de aquellos equipos del municipio de Bolivia, en los torneos provinciales de béisbol, y, aunque nunca logró vestir el uniforme de Ciego de Ávila en campeonatos nacionales, no se apartó de la esfera deportiva en su andar laboral.
Desde máximo dirigente deportivo en el territorio cunagüero, hasta director de la industria deportiva en Florida, Camagüey, y más recientemente al frente del béisbol en Morón. Ahora, comenzando el 2023, se desempeña como comisionado provincial de esta disciplina, por lo que Invasor le invitó a conversar sobre el presente y futuro de la pelota en la tierra de Los Tigres.
“Ya estamos enfrascados en la participación de los equipos 15-16 años y juveniles en sus respectivas justas. Ambos tienen opciones de avanzar a la fase final.
“Para garantizar la continuidad en las diferentes categorías, tenemos un grupo de peloteritos, de la zona Norte de la provincia, de 10 y hasta 12 años, que entrenan en Morón e igual pretendemos hacer en el estadio José Ramón Cepero, con los municipios de la parte Sur; esto nos garantizará tener una mejor selectividad para los talentos que ingresarán en la Escuela de Iniciación Deportiva (EIDE)”.
—Ya que menciona la EIDE..., ¿puede hablarse de alguna mejoría de su campo beisbolero?
—Todas las áreas aledañas del terreno fueron limpiadas, pues antes era un problema, ya que las pelotas que fueran a esa zona casi siempre se perdían, por lo difícil de la búsqueda. También muy pronto contará con su jaula de bateo y ya se cuenta con las instalaciones hidráulicas para el suministro de agua que permita el mantenimiento del césped.
—Pero persiste la escasez de pelotas en todas las categorías…
—Ese es el principal problema para incentivar la participación popular en nuestro pasatiempo nacional. Si no se juega pelota en toda la provincia será muy difícil encontrar talentos. Nuestros entrenadores no son adivinos para saber si un muchacho puede o no brillar en el béisbol, si no tiene la oportunidad de observarlo en un campo de juego.
“Estamos buscando algunas formas de conseguir más pelotas —de hecho ya logramos tener un mayor número de bates—, pero tampoco nos vamos a acomodar con el ‘no tenemos pelota’ para dejar de hacer. Más temprano que tarde aparecerán y debemos tener desde ya la estrategia de nuestro béisbol bien encaminada”.
—¿Qué opinión le merece el colectivo de los principales entrenadores que le rodean?
—Creo que en los 10 municipios hay excelentes técnicos, sobre todo muy enamorados de lo que hacen. Lo mismo sucede con los que trabajan en la EIDE y quienes están al frente en las categorías de mayores, pero debemos darles más protagonismo en lo que hacen. Hay que aprovechar más a quienes han sido glorias de este deporte y poseen un arsenal para enseñar en todas las categorías. Lograr que con frecuencia esos exatletas brinden sus experiencias a los bisoños, será una de nuestras principales encomiendas en los próximos meses.
—¿Otros propósitos para este año?
—Desde luego que lo primero es que nuestros Tigres estén de nuevo en la postemporada y también queremos que la escuadra de béisbol femenino mantenga sus resultados de los últimos años. Ahora, a partir de esta propia semana, comenzará la construcción de un campo de béisbol 5 —bien cerca del Cepero—, pues Ciego de Ávila será sede del Campeonato Nacional juvenil en el mes de marzo.
Es evidente: el otrora shortstop cunagüero tendrá un año de estreno con mucha actividad beisbolera. Que le vaya bien.