Con la actual disponibilidad de agua en Ciego de Ávila se garantiza el desarrollo de las diferentes actividades socioeconómicas proyectadas para el 2020, ello gracias al favorable acumulado de precipitaciones durante los últimos meses.

La provincia, al cierre de septiembre último, registró en su cuenca subterránea un llenado del 81 por ciento, de su capacidad de 808 millones de metros cúbicos (m³), cifra ligeramente superior a la de agosto. Tal situación, sumada al incremento de las lluvias durante la primera quincena de octubre, hace pronosticar a los especialistas terminar el décimo mes del año con volúmenes en los acuíferos por encima del 90 por ciento.

En la agricultura, mayor consumidor de agua en la provincia, se busca la utilización del líquido de acuerdo con normas establecidas para cada cultivo. Foto: Pastor Batista Valdés

Este dato constituye una excelente noticia, al tener en cuenta que los 15 sectores hidrogeológicos del territorio avileño proporcionan en su conjunto nueve de cada 10 litros del vital líquido destinados para el consumo.

Pedro Rodríguez Mora, director técnico de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico Ciego de Ávila, informó a Invasor que se discutió recientemente el balance de aguas del 2020, en el cual está garantizado el abasto a la población, así como también a los diferentes clientes de la economía y la sociedad que demandan el recurso.

Los mayores consumidores en volúmenes resultan el grupo azucarero Azcuba y la Agricultura, por sus componentes de riego; en el caso de la última aparecen empresas como las agropecuarias La Cuba (con sus cuatro cooperativas asociadas), Arnaldo Ramírez, Cubasoy y la Agroindustrial Cítricos Ceballos con sus plantaciones de frutales, dijo el directivo.

También existe un sector de la industria e instituciones catalogados como altos consumidores, entre los que se encuentran los centrales azucareros, los hospitales y las grandes escuelas; a ellos, como a los demás clientes, se les exige el empleo del agua de acuerdo con sus niveles de actividad real, aunque dispongan de cantidades planificadas superiores para ese periodo, de esta manera se persigue el uso racional y productivo de un recurso limitado, explicó Rodríguez Mora.

“En el caso de varios hoteles de la cayería norte avileña que se sobregiraban en los volúmenes del líquido contratado, actualmente ese escenario negativo se ha revertido. Acciones como el control diario del gasto y el metraje en las instalaciones permiten que la empresa Aguas Cayo Coco oscile su consumo del 95 al 100 por ciento. Los sectores hidrogeológicos CA-I-5 y el CA-I-6 de la cuenca norte, principales fuentes de abasto del destino Jardines del Rey, hoy disponen de un nivel superior a la explotable, por lo cual la actividad turística tiene garantizada el agua para el próximo año.”

Aunque las lluvias fueron agradecidas con la geografía avileña en el periodo húmedo y en los meses anteriores, lo cual nos permite exhibir la actual bonanza, resulta imperativo potenciar el ahorro y el uso racional del agua para retrasar en la mayor medida la sequía.